TRATAMIENTO Y BIENESTAR CORPORAL Y EMOCIONAL
Feng Shui
La cultura oriental está impregnada de sabiduría. Poco a poco hemos ido descubriendo su profundidad y su verdadera efectividad al aplicarla. Se basa totalmente en la naturaleza y sus ciclos, así como en la interacción del ser humano con su entorno, su propio ser y su propia madre: la naturaleza.
El feng shui es una disciplina extraordinaria: emerge de China y consigue gran importancia y difusión actualmente en occidente debido a las diversas opciones que representa para armonizarnos con lo que nos rodea y crear espacios agradables y adecuados que permiten y favorecen el crecimiento físico, mental y espiritual del ser humano.
Es una filosofía producto de la observación, del estudio y de la sensibilidad del hombre hacia su entorno. Procede de un milenario investigar y nos brinda una gran respuesta a muchos de nuestros problemas cotidianos. Su principal finalidad es la armonía del universo, del mundo, del hombre y su entorno; somos parte de un todo, y el caminar en armonía con éste nos permite fluir mejor con nosotros mismos y nuestra propia naturaleza.
La cultura oriental considera al aliento cósmico, llamado Chi, la energía o fuerza que nos mueve, nos rodea, beneficia o bloquea, y éste debe circular y fluir con libertad y tranquilidad a su paso por el entorno para favorecer y promover un ambiente saludable para el hombre.
El estudio del feng shui es profundo; consiste en comprender la esencia del todo y del ser humano, es aprender a vivir en armonía con el mundo, con la naturaleza, con el cosmos y con nosotros mismos para poder generar cambios trascendentes y obtener como resultado una vida en equilibrio y abundancia tanto espiritual como física.
¿QUÉ ES EL FENG SHUI?
El feng shui, cuya traducción literal es viento-agua, originalmente llamado kan yu, es el arte chino de la definición y diseño interior y exterior de un lugar determinado, partiendo de la orientación y ubicación de la puerta de entrada o acceso principal, para mejorar el Chi (aliento cósmico) del mismo. El Chi, o energía sutil de la naturaleza, es en lo que basa su estudio el feng shui para facilitar la armonía y el equilibrio del hombre y la tierra; estos forman un todo, la salud de uno repercute en el otro, es la cooperación mutua que nos lleva a crecer. Ambos requieren la circulación equilibrada del Chi, positivo y negativo, que dan origen al Tao, cuyo significado es el “Todo”. El Tao se refiere al camino o sendero que siguen los polos opuestos (yin/yang) para darse vida y lugar, obteniendo por resultado el equilibrio perfecto.
El feng shui es el arte de encontrar un lugar adecuado para cualquier cosa de manera exacta y propicia.
Acorde con esta filosofía, nuestra vida y destino están entrelazados con el trabajo de las misteriosas fuerzas del universo y la naturaleza más que con las propias acciones del hombre; estas fuerzas son las responsables de la salud, prosperidad y buena suerte del ser humano. Todas las transmutaciones, desde lo cósmico a lo atómico, resuenan en nuestro interior. Algunos lugares son especiales, con más suerte o con mejores predisposiciones que otros. Si mejoras el lugar, cambias tu suerte, por consiguiente la meta del feng shui es modificar el ambiente para atraer la buena fortuna a tu vida.
El feng shui es aplicable desde pequeños espacios como una recámara, hasta las más grandes extensiones como rascacielos, en un jardín, en una empresa y hasta en el cuerpo humano a través de sus propios centros de energía (los chakras).
El feng shui no es un curso que se realiza y después se colocar objetos al azar, no es el simple cambio de olores y mobiliarios; es el estudio profundo de la vida, su origen, el amor a la naturaleza y al planeta. Se convierte en una “forma de vivir” que nos lleva a crecer y fluir en armonía con el todo.
EL CHI
Se conoce como Chi a la fuerza que une al hombre con su entorno, es el espíritu y energía humana o aliento cósmico. Es el elemento más importante en la aplicación del feng shui. El chi da vida a las plantas y a los animales, es la voluntad que estructura montañas y volcanes, determina la forma de los árboles y plantas y genera ese toque definitivo a cada ser humano que llamamos personalidad. Es la esencia de la vida, y a esta energía también se la conoce en China como “venas del dragón”.
El chi asciende y desciende, se mueve en todas direcciones. El que asciende es la energía yang (-). El chi yang representa y atrae movimiento, mientras que el chi yin representa calma y relajación, provoca falta de movimiento.
El chi existe en todo, y así como la acupuntura trabaja con el chi del cuerpo, el feng shui traduce el chi de nuestro entorno trabajando con la superficie de la tierra y el chi que la caracteriza. Para ser favorable, el chi debe circular ascendentemente y en espiral. Debe fluir suavemente a través del cuerpo hacia arriba, hasta la cabeza; si se bloque el cuerpo, lo reflejará y se presentarán trastornos y malestares físicos a través de los chakras.
Sus características y la forma en que se manifiesta en cada uno de nosotros es diferente, y es lo que nos da un toque distinto a cada ser, a cada cultura, a cada raza y a cada lugar del planeta. El objetivo del feng shui es armonizar el chi del ambiente para mejorar el flujo del mismo en nuestro interior, mejorando así nuestra vida y destino. El estudio del chi nos lleva a determinar su recorrido para llegar a nosotros, sus vías de acceso a nuestra casa u oficina y a nosotros mismos, así como el encontrar los puntos agresivos que impiden que circulen con libertad.
El chi atrae a nuestra vida buenas oportunidades de trabajo, de crecimiento y abundancia si nosotros nos aliamos con él y aprendemos a fluir en su compañía, para fomentar una comunicación a través del lenguaje natural con la naturaleza, el cosmos, la madre misma: la tierra.
TAO YIN-YANG
Dos factores importantes en feng shui son armonía y equilibrio, es decir, dos conceptos que unen al hombre con el universo, y a este proceso se le llama Tao. Es el proceso de cambio constante basado en los polos opuestos influenciándose uno al otro en su propia existencia.
El taoísmo es una filosofía que se basa en los patrones de la naturaleza. Complementado con el I Ching (El Libro de los Cambios), glorifica a la naturaleza y, a través del amor a la misma, dan sentido a la vida y paso del hombre por la tierra.
Para que el yin exista debe existir el yang, y viceversa; por ejemplo: el yang es masculino y el yin es femenino; para que pueda existir lo masculino es indispensable la existencia de lo femenino, y viceversa; para que exista lo femenino, debe existir lo masculino; ambos polos se dan vida el uno al otro y se complementan para coexistir.
El yin/yang nos ofrece una alternativa para ajustar el equilibrio de nuestra vida, tanto en nuestras relaciones sociales como con lo que nos rodea; al detectar el predominio de una de ambas fuerzas en nuestro entorno, se debe reforzar con la fuerza opuesta para obtener ese equilibrio que traerá armonía. A nivel personal también existe la influencia de estas dos fuerzas, por ejemplo: según las fases de la luna, nuestra actitud se convierte en más yin o más yang; en luna llena nos convertimos más yang y activos, en los días siguientes, conforme decae la luna, nos vamos volviendo más yin y es el momento de cultivar nuestro espíritu y paz interior, y lo mismo sucede con las estaciones del año como verano (yang) e invierno (yin).
El recorrido del sol atrae al amanecer energía yang a la casa y al atardecer energía yin, por lo que se recomienda que en el área de la casa donde llega la energía yang, se coloquen las habitaciones de actividades que requieran nuestra energía yang, y en el lado contrario, las que representen el yin. Si tú eres una persona demasiado yang, puedes pasar más tiempo en tus habitaciones yin para equilibrar tu propio chi, y viceversa. Aquellas habitaciones que se consideran yang, son las dedicadas a espacios de reunión y convivencia, como el salón o el comedor, mientras que las de descanso, como los dormitorios, se consideran yin.
LAS NUEVE CURAS BÁSICAS
Las nueve curas básicas son de gran ayuda para corregir algunos problemas, sobre todo arquitectónicos. Hay dos tipos de curas:
- Las curas ru-shr son lógicas, racionales, tangibles y materiales.
- Las curas chu-shr son irracionales, místicas y trascendentales.
Ambas son necesarias para mejorar el chi humano, generando salud, alegría y buena fortuna en el hogar a través de su empleo adecuado en nuestra casa.
Existen nueve curas básicas (ru-shr):
- Objetos brillantes: espejos, esferas de cristal facetadas, luces.
- Sonidos: Wind Chimes (campanas de viento), campanas, música.
- Objetos vivos: plantas, bonsáis, flores, acuarios, mascotas.
- Objetos móviles: móviles, molinos de viento, veletas, fuentes.
- Objetos pesados: piedras o estatuas.
- Objetos eléctricos: aire acondicionado, estéreo, televisión.
- Flautas de bambú.
- Colores.
- Creatividad.
Los espejos se consideran “aspirinas” del feng shui por el importante uso que tienen; se emplean tanto para atraer el chi favorable de la calle como para rechazar el chi de un edificio vecino muy alto que perjudique. Existen espejos convexos, cóncavos y planos. El convexo atrae y amplía todo aquello que queremos atraer, como dinero o el chi de la calle. El cóncavo minimiza lo que es agresivo hacia nuestra casa en el exterior.
Las esferas de cristal prismáticas facetadas son importantes pues tienen la cualidad de armonizar el chi del lugar, de completar áreas ausentes y corregir errores de diseño, por ser objetos refractores de luz y energía. Las esferas de cristal aumentan el flujo del chi en un lugar y armonizan su distribución debido a su cualidad de refracción de la luz. La luz es una cura presente en cualquier ambiente. Nos ayuda a completar áreas ausentes y a evitar la pérdida del dinero.
Las Wind Chimes se consideran moderadoras del flujo de chi. Se usan para atraer chi positivo y dinero a una casa o un negocio. Son armonizadoras a través del sonido. Las plantas simbolizan naturaleza, crecimiento, vida y conducen el chi por la habitación, son indicadores de buen feng shui; en la entrada de la casa generan y atraen buen chi, al igual que impiden el acceso del chi agresivo y violento que pueda provenir del exterior. Fuera de una oficina o restaurante, traerán clientes y dinero.
Los bonsáis son muy efectivos en casos de personas enfermas, ya que al representar crecimiento detenido, será el efecto que ocasionarán en la enfermedad, sobre todo en casos de enfermedades que se reproducen como el cáncer. Las peceras son representantes de la vida y el agua, del dinero. Los objetos móviles o eléctricos estimulan la circulación del chi y controlan los efectos de corredores largos y angostos donde predomina el chi yin. Las fuentes generan dinero y activan el chi, también sirven de protección y favorecen los buenos proyectos profesionales y económicos. Los objetos pesados nos ayudan a darle solidez y estabilidad a una situación de trabajo o matrimonio. Las flautas de bambú, por su significado religioso, traen paz, seguridad y estabilidad a un lugar. Alejan los robos y retiran los malos espíritus de la casa.
El color nos ayuda notablemente colocado en las áreas correspondientes del octágono, nos armoniza la energía y levanta el chi del lugar. Otro elemento importante es la creatividad, ya que de su buena aplicación logramos un ambiente de armonía, confort y bienestar.
La siguiente cura (chu-shr) consiste en los tres secretos y es indispensable para que cualquier cura ru-shr sea efectiva; comprende una bendición activa que abarca el cuerpo, el habla y la mente, corresponde al camino trascendental y es lo que imprime nuestra fuerza mental y espiritual y la voluntad a nuestras curas. Abarca:
- El cuerpo: hacer mudras (movimientos trascendentales del cuerpo). El mudra que se emplea en este caso es uniendo el dedo medio y el anular con el pulgar y señalar la cura con el meñique y el índice.
- El habla: pronunciar algún mantra (palabras sagradas muy poderosas) nueve veces seguidas. Oración acorde con su religión, por ejemplo: IM MA NI PAD ME HUM.
- La mente: visualizar lo que se quiere mejorar al colocar una cura en ese lugar. En esta cura el elemento más importante es la fe y la fuerza que se le imprima.
PERFILES
- Familia – Madera – Azules y verdes
- Dinero – Madera – Azules, rojos y morados
- Fama – Fuego – Rojo
- Matrimonio – Tierra – Rojos, rosas y blanco
- Hijos – Metal – Blanco y pasteles
- Benefactores – Metal – Blanco, gris y negro
- Trabajo – Agua – Negro y oscuros
- Conocimiento – Tierra – Amarillos y térreos