QUÉ SIGNIFICA DECIDIR A FAVOR DE LA LUZ

 

Libera Tu Ser - David Hoffmeister "QUÉ SIGNIFICA DECIDIR A FAVOR DE LA LUZ"



Del Libro de David Hoffmeister "Unwind Your Mind - Back to God" - Capítulo V
Traducido al castellano por Juan Illan Gómez.

 

Participante: ¿Es el perdón sencillamente centrarse en la Luz, o es un proceso de mirar lo negativo y verlo como lo que es, o sea nada?

David: Cuando te unes a la Luz, todo tu propósito es ver lo falso y mirar más allá de ello. En perdonar, o pasar por alto, es donde se juntan los dos en el sentido de ser una y la misma cosa. Jesús nos dice cosas como: Toma mi mano, querido niño, vamos a ir ahí abajo a mirar esa cosa oscura. Son metáforas de la unión con la Luz. No se trata sólo de contemplar intelectualmente lo negativo.

Participante: ¿Con qué miras lo negativo? Miras con la Luz. ¿Cómo ibas a poder mirarlo si no fuese con la Luz? Parece que una decisión es simplemente volverse hacia la Luz y otra decisión es volverse a la Luz con mi intelecto individual.

David: Y así volvemos a la metafísica. A cada instante estamos tomando la decisión de decidir con el Espíritu Santo o con el ego. Esas son nuestras únicas dos alternativas, no hay más. Parece que hay un "yo" que puede tomar decisiones sin el Espíritu Santo ni el ego. Pero no es ese el caso. Jesús es muy claro sobre eso en la sección Reglas para tomar decisiones del Capítulo 30. Tu margen está limitado; eliges el uno o el otro. Cada decisión que tomas te lo trae todo o nada, aunque no lo parezca. Parece que hay mucha zona gris en medio, como si estuvieras flotando, diciéndote: Vale, hoy haré esto o haré aquello. Parece que puedes decidir si quieres comer bizcocho de chocolate. Pero el asunto es que en el verdadero fondo de la mazmorra están el ego y el Espíritu Santo, muy al fondo de la mente. Y recuerda que una decisión es una conclusión que se basa en todo lo que crees. Es el Espíritu Santo o el ego, no tienes más alternativas.

¿Qué pasa con todas las capas de creencias falsas? La decisión se toma muy abajo aquí en el sótano y luego sale a la superficie. Creo que estoy sometido al tiempo y al espacio. Creo en los cuerpos. Creo que soy un hombre. Creo que vivo en Cincinnati, Ohio. Creo que tengo un gato. Creo que estoy escaso de dinero. Creo que es jueves. Creo que son las 12:30 y...

Participante: Y creo que tengo que comerme un trozo de bizcocho de chocolate. [risas].

David: ¡Tengo que comer bizcocho de chocolate! ¿Ves cómo va? No, no, no, estás tomando una decisión con el ego o con el Espíritu Santo y así sale a la superficie. ¡Ahora tienes toda mi atención, Jesús! "No le daré valor a lo que no lo tiene". Ej-133 Todas las decisiones que tomas te traen el todo o la nada.  En la lección 133 él te da los criterios que necesitas aprender para que te ayuden a distinguir lo que tiene valor de lo que no lo tiene. ¡Esto se está volviendo muy práctico! Dice que cualquier cosa que elijas, salvo que sea eterna, no te trae nada.

Participante: ¡Ay, Dios!

David: Sí.

En primer lugar, si eliges algo que no ha de durar para siem­pre, lo que estas eligiendo carece de valor. Un valor temporal no tiene valor alguno. El tiempo jamás puede anular ningún valor real. Lo que se marchita y perece jamás existió, y no tiene nada que ofrecerle al que lo elige. Ej-133.6.

¡Y éste es el primer criterio! ¡Éste es el primero! ¡No es el número cinco o seis! Entonces sigues leyendo y ves que hay algo en esto. Todos los ídolos, todo el afán de ser especial, y todas esas capas y pilas de cosas en medio en las que la mente pone su interés; de ahí es de donde viene la culpabilidad. Una mente despejada ha bajado a través de todas las capas y niveles. Jesús ha transcendido al ego y ve que el ego no ofrece nada. ¡No en la planta 23 o 22, no en el armario! ¡Nada! ¡No hay nada de valor ahí! Entonces se puede ver la alternativa como es. ¡Esto no es una alternativa! Cuando llegas al fondo ves que no hay alternativa en absoluto. La Expiación es básicamente aceptar la decisión que ya está tomada. El Espíritu Santo es en realidad la única decisión. Esto no implica ninguna privación. Pero hasta que llegas al fondo, ¡muchacho, vaya si parece un sacrificio! Porque yo quiero lo que hay en la planta 23, y en la planta 9 en aquel salón, y en la habitación 7, eso... le llamo a esto el corral. Aquí lo tienes Jesús, puedes tener todos esos, pero no estos de aquí.

Participante: ¿Pero no es por eso por lo que es un proceso?

David: Es un proceso hasta que empiezas a generalizar o transferir el aprendizaje. Siempre hablamos del interruptor principal. El Curso dice que puedes elegir en un instante… ¡a lo mejor hoy! Llega un punto en el que te vuelves muy hábil en reconocer pensamientos del revés. Te vuelves muy hábil en darte cuenta de que el sol no me está acalorando y esa persona no me hizo enfadar.

Participante: Pero no empiezas por eso.

David: No, no empiezas por eso en absoluto. De hecho, si estás dando una clase a recién llegados ni siquiera lo mencionas, porque no te interesa meterte en cuestiones hipotéticas. Por eso estamos ahora aquí, para profundizar todo lo que podamos. Podrías pensar, incluso con algunas de las ideas que hemos comentado: Tal vez algo de esto sea verdad pero yo aún tengo mis reservas. Es como si estuviéramos arrojando montones de semillas. No es que todo el mundo tenga que recoger las semillas, y llevárselas a su casa y plantarlas.

Participante: Nadie es culpable de no recoger las semillas.

David: ¡Es arrojar semillas sólo por la alegría de hacerlo!


Donativos a LiberaTuSer

DONATIVOS

Aquí puedes realizar tu Donativo. Con ello estarás ayudando a sufragar los gastos de mantenimiento y alojamiento de este sitio.

Si deseas realizar un Donativo, haz clic sobre la flecha.

TU
APORTACIÓN
ES
VALIOSA

LiberaTuSer