CONTEMPLAR EL ODIO EN TODA SU EXTENSIÓN Y SOLTARLO LUEGO
Del Libro de David Hoffmeister "Sosiega la Mente - De Regreso a Dios" (Unwind Your Mind - Back to God) - LIBRO II - Capítulo IV
Traducido al castellano por Juan Illan Gómez.
Hola David:
Estoy cansado de UCDM. Lo he estado estudiando durante más de ocho años. He ido a grupos del Curso. He practicado tanto el perdón como el ver la cara de Cristo en mis hermanos y hermanas. Tengo más que "un poco de disposición" a dejarme guiar por el Espíritu Santo a ver mi unicidad con Dios. Siento que he estado en el punto de dar el "último paso" mucho tiempo. He esperado que Jesús, o alguien, me lleve a cruzar ese corto puente al jardín de la alegría y la paz interior que promete el Curso. Sé que no puedo hacer que ocurra, y que no se ha hecho para mí.
He conocido a más de cien estudiantes del Curso, tú incluido. Pero tú eres el único a quien considero iluminado. Ahora me parece que el Curso es una lotería. Sólo uno de cada cien, o de cada mil, o de más, gana el premio de que Cristo lo guíe finalmente a ese jardín. ¿Qué clase de Dios es éste que juega así con nosotros?
Amado:
Gracias por ofrecer lo que hay sobre tu corazón. Juntos lo vamos a elevar hasta el Espíritu Santo.
La frustración y el enojo son reacciones del ego al "dios" que fabricó, un "dios" que juega con los humanos y concede la "iluminación" sólo a un pequeño grupo selecto en toda la historia. Si esto fuese Dios, entonces Dios sería cruel en lugar de amoroso, y tú y yo seríamos humanos. ¡Nuestra realidad es Espíritu, y vive por siempre y para siempre! La Voluntad del Dios real es sólo Amor Perfecto y Felicidad, y no tiene nada que ver con sueños de juegos, números ni grupos. Dios es abstracto, y conocer a Dios en el Espíritu es recordar lo abstracto. Pero antes es necesario el perdón de las ilusiones (ver como falso lo que es falso).
Hace falta "estar muy dispuesto" a ver que todos los acontecimientos, encuentros y circunstancias son útiles, a ver que todas las cosas obran conjuntamente para el bien. No hay ninguna cantidad de pruebas que pueda convencer a una mente de lo que ésta no quiere. Pero, como sólo hay Una Mente, la experiencia del Amor tiene que extenderse para ser Él mismo. El Amor Es. Puede parecer que uno es consciente del Amor o no es consciente del Amor. Lo segundo es la ilusión y hay que perdonarla o soltarla. Estoy unido contigo en esto y no podemos dejar de reconocer el Plan de Dios para la salvación, pues sólo éste es posible. Esto es lo que significan frases como: "Todo es posible con Dios" y "Si Dios está con nosotros, ¿quién puede estar en contra?".
Lo he dedicado todo a compartir y extender la experiencia de la Iluminación, y esto es una expresión natural del Amor que siento dentro. Proclamo lo que soy en nombre de todos, porque somos lo mismo, no somos diferentes. Tenemos el mismo Origen. Somos el mismo Espíritu. Somos el mismo Ser. La Iluminación es un Estado Mental que contempla el mundo desde la experiencia interior de la paz y no ve mundo alguno separado de la mente. ¡Veo nuestra Inocencia y me regocijo en que el Amor es real! ¡Somos el Mismo!
El enojo y la frustración que parecen salir a la superficie de tu conciencia no hace falta reprimirlos. Tienes que contemplar el odio en toda su extensión antes de poder soltarlo. En este sentido, no se puede negar la cólera, sino que tiene que ser expuesta antes de que se la pueda soltar y entregar al Espíritu Santo. El Espíritu Santo no puede llevarse lo que está protegido de la conciencia, y tiene que esperar hasta que el enojo se le ofrece voluntariamente. Éste es el significado de: ¿Preferirías tener razón a ser feliz? La confusión de la identidad es la raíz de toda cólera, y ninguna imagen ni concepto del yo soportará la Luz de la Verdad.
Me uno contigo en vaciar la mente de todos los falsos ídolos, imágenes y conceptos, porque es la Voluntad de Dios que la Luz y el Amor se extiendan por siempre y para siempre en el Ser ilimitado e infinito. Esto es lo verdaderamente Natural. Tú eres Santo, Eterno, Libre e Íntegro, siempre en paz en el Corazón de Dios.
Llegados a un punto, Helen le pidió a Jesús que le quitase sus temores. Lo que Jesús le dijo, en esencia, fue que no podía hacer eso porque sería manipular la ley de causa y efecto más básica. Podía, sin embargo, ayudarla a suprimir los límites mentales que estaba produciendo el miedo. Eso es lo que yo tengo que decirte. Tu mente es tan poderosa como la mía, porque compartimos la misma mente. No te puedes despertar a ti mismo, y no hay nadie fuera de tu mente que pueda Despertarte. Podemos, sin embargo, mirar juntos las creencias que producen el enfado y la frustración, para que se las pueda exponer y soltar. Y al final, todo se reduce al deseo. La verdad se restablecerá en tu conciencia por tu deseo, igual que se perdió por tu deseo de otra cosa. El deseo produce pruebas. Aquí tienes algunos mensajes del Curso que dan testimonio de la ayuda y de la claridad a las que señalo con mis palabras:
Tal vez te quejes de que este curso no es lo suficientemente específico como para poderlo entender y aplicar. Mas tal vez no hayas hecho lo que específicamente propugna. Éste no es un curso de especulación teórica, sino de aplicación práctica. Nada podría ser más específico que el que le digan a uno que si pide recibirá. El Espíritu Santo te dará la respuesta para cada problema específico mientras creas que los problemas son específicos. Su respuesta es a la vez una y muchas mientras sigas creyendo que el que es Uno es muchos. Puede que tengas miedo de Su especificidad por temor a lo que crees que ésta pueda exigirte. Mas es únicamente pidiendo como aprenderás que lo que procede de Dios no te exige nada en absoluto. Dios sólo da, nunca quita. Cuando te niegas a pedir, es porque crees que pedir equivale a quitar en vez de a compartir. T-11.VIII.5.
No pienses que puedes encontrar la felicidad siguiendo un camino que te aleja de ella. Eso ni tiene sentido ni puede ser la manera de alcanzarla. Tú que piensas que este curso es demasiado difícil de aprender, déjame repetirte que para alcanzar una meta tienes que proceder en dirección a ella, no en dirección contraria. Y todo camino que vaya en dirección contraria te impedirá avanzar hacia la meta que te has propuesto alcanzar. Si esto fuese difícil de entender, entonces sería imposible aprender este curso. Mas sólo en ese caso. Pues, de lo contrario, este curso es la simple enseñanza de lo obvio. T-31.IV.7.
Cuando no cumples con los requisitos de este curso, estás simplemente cometiendo un error. Y lo único que ello requiere es corrección. Permitir que el error siga repitiéndose es cometer errores adicionales, que se basan en el primero y que lo refuerzan. Éste es el proceso que debes dejar a un lado, pues no es sino otra manera de defender las ilusiones contra la verdad. Ej-95.9.
La salvación no transige en absoluto. Transigir es aceptar sólo una parte de lo que quieres: tomar sólo un poco y renunciar al resto. La salvación no renuncia a nada. Se les concede a todos enteramente. Si permites que la idea de transigir invada tu pensamiento, se pierde la conciencia del propósito de la salvación porque no se reconoce. Dicho propósito se niega cuando la idea de transigir se ha aceptado, pues es la creencia de que la salvación es imposible. La idea de transigir mantiene que puedes atacar un poco, amar un poco, y ser consciente de la diferencia. De esta manera, pretende enseñar que un poco de lo mismo puede ser diferente, y, al mismo tiempo, permanecer intacto, cual uno solo. ¿Tiene sentido esto? ¿Es acaso comprensible?Este curso es fácil precisamente porque no transige en absoluto. Aun así, parece ser difícil para aquellos que todavía creen que es posible transigir. T-23.III.3-4.
Este curso o bien se creerá enteramente o bien no se creerá en absoluto. Pues es completamente cierto o completamente falso, y no puede ser creído sólo parcialmente. Y tú te escaparás enteramente del sufrimiento o no te escaparás en absoluto. La razón te dirá que no hay un lugar intermedio donde te puedas detener indeciso, esperando a elegir entre la felicidad del Cielo o el sufrimiento del infierno. Hasta que no elijas el Cielo, estarás en el infierno y abatido por el sufrimiento. T-22.II.7.
Soy Guiado a recomendarte que repases el epílogo de la Clarificación de términos del Curso, y también los cinco últimos párrafos de El canto de la oración. Como una suave caricia, estos bellos pasajes llaman a la mente a dejar atrás sus "sueños de maldad" y recibir "el dulce abrazo del Amor eterno y la paz perfecta".